Secreto Sarayaku

Misha Vallejo Prut
Dibujo de un tucán sobre un panel solar averiado.
Dibujo de un tucán sobre un panel solar averiado. La mayor parte de la energía eléctrica en Sarayaku proviene de paneles similares. 2016.
Gorro hecho con el pico de un tucán dentro de una bolsa de plástico.
Un gorro hecho con el pico de un tucán yace en un paquete de plástico a orillas del río Bobonaza, cazado previo a una importante festividad. 2017
Cabezas de tucanes.
Último día de celebración del Uyatntza Raymi. Uno de los priostes viste las pieles, plumas y cabezas de todos los animales que su equipo logró cazar. La tradición dicta que estos elementos deben ser devueltos a la selva para cumplir con el ciclo de la vida. 2017.
Dos participantes de una competencia de lucha.
Javier Cisneros participa en una competencia de lucha en la plaza central de la comunidad durante las festividades de la Pachamama. 2015.
Mujer unta wituk en su cabello
Magdalena Santi unta wituk en su cabello. El wituk es un tinte oscuro hecho a base de fruta amazónica del mismo nombre y tiene la cualidad de mantenerse en el cabello hasta por dos semanas. 2016.
Hombre con un sobrero de cabeza de cuchucho tocando un piguano.
Un hombre que viste un sombrero hecho con la piel y cabeza de un cuchucho, y cuyas manos están pintadas con wituk, toca piguano (una especie de flauta) durante el primer día del Uyantza Raymi. 2017.
Persona bebiendo chicha de yuca.
Celso Aranda toma chicha durante el tercer día de festividades del Uyantza Raymi. La chicha es una bebida tradicional de yuca. 2017.
Niña sostiene una cabeza de venado.
Dayna Malaver sostiene la cabeza de un venado que su padre cazó la noche anterior a orillas del río Rotuno. 2015.
Joven con la cara pintada vistiendo una polera de Kiss.
Retrato de Lino Gualinga durante el primer día de celebración del Uyantza Raymi. 2017.
Secreto Sarayaku
La comunidad Kichwa de Sarayaku, que se encuentra en la selva amazónica ecuatoriana, mantiene una conexión física y espiritual con la selva y sus seres guardianes para mantener el balance en su mundo. La comunidad cree en el Kawsak Sacha o Selva Viviente, que relata al bosque húmedo tropical como un ente vivo, consciente y sujeto a derechos, en el que todos sus elementos (plantas, animales, humanos, ríos, viento) tienen espíritu y son interdependientes. Si uno de ellos es amenazado, los demás se verán afectados, desencadenando una reacción en cadena. La comunidad toma de la selva solo lo necesario para sobrevivir. Para ellos, la protección de su hogar es primordial, no solo para su propia supervivencia, sino para la de la humanidad.

A primera vista, puede que esta narrativa parezca minúscula como para afectar la vida en el planeta, pero no desde el punto de vista Kichwa. Según ellos, todos somos parte de un gran y complejo organismo: aquello que los afecta, afectará a todo el mundo. Todo está interconectado.

Mediante redes sociales, los Sarayaku se han convertido en activistas cibernéticos: a través de una conexión satelital acceden al Internet para compartir su mensaje medioambiental y para recibir apoyo internacional. Al mostrar su vida en la selva, están convencidos de que inspirarán a gente alrededor del mundo a implementar diferentes estrategias para luchar contra la crisis climática. Quieren ser conocidos internacionalmente porque de esta forma será más difícil que el gobierno o las compañías petroleras los desaparezcan. Paradójicamente, la conexión a través del Internet con el “mundo exterior” funciona en ambos sentidos y hoy en día hay una creciente influencia de la cultura occidental en la vida diaria de los Sarayaku.

Secreto Sarayaku aborda también la relación de la comunidad con los Sacha Runakuna o Seres Supremos Protectores de la Selva. Estas deidades mitológicas no pueden verse a simple vista sino a través de las conexiones espirituales de los sabios yachackuna. Es por ello que la serie fotográfica plantea la pregunta: ¿Cómo retratar aquello que no puede verse, pero que se sabe que existe?

La cosmovisión Kichwa no es lineal. Se asemeja a un círculo con cientos de nodos interconectados en su interior. Esta obra toma este concepto como punto de partida por lo que se puede acceder a sus diferentes elementos tanto por separado como en conjunto.

Los elementos que componen la obra son el documental web www.secretosarayaku.net, el libro Secreto Sarayaku, una exhibición y un podcast. Este proyecto transmedial es una invitación para adentrarse en una selva de información donde se entremezcla la sabiduría indígena ancestral con la occidental contemporánea.

Biografía

Es un narrador audiovisual cuyo trabajo se encuentra en la frontera entre lo documental y lo artístico. Magíster en Artes por la Universidad de las Artes de Londres, ganó la beca Prince Claus Fund (Ámsterdam, 2019), el premio Photo Europe Network del Festival Photon (Valencia, 2018) y el Premio Nacional de las Artes (Ecuador, 2015), entre otros. Su trabajo ha sido expuesto en galerías y festivales como la Biennale Für Aktuelle Fotografie (Mannheim, 2022), el Internacional Festival of Photography PHOTO (Melbourne, 2022), el LUMIX Festival of Young Visual Journalism (Hannover, 2020), el Bronx Documentary Center (Nueva York, 2018), el festival Rencontres de la Photographie (Arles, 2018). Ha publicado los fotolibros Al Otro Lado (Editora Madalena, Sao Paulo, 2016), Siete punto Ocho (RM, Barcelona, 2018) y Secreto Sarayaku (RM, Barcelona, 2020). En 2020 lanzó su primer documental web interactivo secretosarayaku.net. Actualmente dirige Hijos de la Luz, su primera película documental.

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